En un mundo donde la tecnología avanza a pasos agigantados, una startup neurotecnológica está marcando un hito en la integración entre el cerebro humano y dispositivos de consumo. Synchron, una empresa especializada en interfaces cerebro-computadora (BCI), ha anunciado un logro impresionante: la conexión de su implante cerebral con el Apple Vision Pro. Este avance promete cambiar la vida de personas con parálisis, permitiéndoles controlar dispositivos únicamente con sus pensamientos.
¿Qué es Synchron y su BCI?
Synchron ha desarrollado un dispositivo BCI diseñado para ayudar a personas con parálisis a controlar tecnología como teléfonos inteligentes y computadoras. La empresa ha implantado este dispositivo en seis pacientes en los Estados Unidos y en cuatro en Australia, pero aún espera la aprobación de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) para comercializar su tecnología a mayor escala.
A diferencia de otras compañías en el campo, Synchron ha optado por un método menos invasivo. Su BCI se implanta a través de la vena yugular, eliminando la necesidad de una cirugía cerebral abierta. El dispositivo se conecta a un vaso sanguíneo en la superficie de la corteza motora del cerebro, y una antena ubicada bajo la piel en el pecho transmite los datos cerebrales a dispositivos externos.
El Apple Vision Pro y la accesibilidad
El Apple Vision Pro, lanzado en 2023, se controla comúnmente mediante movimientos oculares, comandos de voz y gestos con las manos. Sin embargo, Synchron ha trabajado arduamente para hacer que este dispositivo sea accesible para pacientes que no pueden hablar o mover sus extremidades superiores. La integración con el Vision Pro permite que personas con parálisis puedan enviar mensajes de texto, jugar juegos como el Solitario y ver televisión, todo mediante sus pensamientos.
Thomas Oxley, CEO de Synchron, destaca que la plataforma de accesibilidad de Apple es «la mejor en su clase», lo que explica por qué la empresa ha decidido comenzar su colaboración dentro del ecosistema de Apple. Además, Apple ha mostrado un gran apoyo en esta integración.
El caso de éxito de Mark
Uno de los pioneros en esta tecnología es Mark, un paciente de 64 años diagnosticado con esclerosis lateral amiotrófica (ELA), una enfermedad degenerativa que provoca la pérdida gradual del control muscular. Mark ha perdido la función en sus hombros, brazos y manos, pero aún puede hablar y caminar distancias cortas.
Mark ha estado practicando con el BCI y el Vision Pro desde abril de 2023, y ha logrado utilizar el dispositivo para interactuar con el mundo digital de maneras que antes le eran imposibles. Ha enviado mensajes, jugado y explorado aplicaciones que antes eran inaccesibles debido a su condición. Además, ha comenzado a utilizar el Vision Pro para crear arte, una actividad que anteriormente disfrutaba, pero que había dejado de hacer debido a la pérdida de movilidad en sus brazos.
Competencia en el mundo de las BCI
Synchron no está sola en la carrera por desarrollar interfaces cerebro-computadora. Otras empresas como Paradromics, Precision Neuroscience, Blackrock Neurotech y Neuralink, la empresa de Elon Musk, también están avanzando en este campo. Sin embargo, cada una de estas compañías tiene enfoques y ambiciones diferentes.
Neuralink, por ejemplo, ha adoptado una estrategia más ambiciosa con un dispositivo que cuenta con 1,024 electrodos para capturar un mayor número de señales cerebrales. Esto le ha permitido a su primer paciente jugar videojuegos, mover un cursor en la computadora y navegar por internet, todo mediante pensamientos. Synchron, por otro lado, trabaja con una matriz de 16 electrodos, diseñada para tareas más específicas y con interfaces personalizadas.
Una de las grandes ventajas de Synchron es que su dispositivo puede ser implantado sin necesidad de abrir el cráneo, lo que reduce el riesgo y hace que el procedimiento sea accesible para una mayor cantidad de pacientes.
La integración con Alexa y el futuro de la BCI
Uno de los desarrollos más emocionantes de Synchron es su reciente integración con el asistente virtual Alexa de Amazon. Gracias a esta tecnología, Mark ahora puede controlar su hogar inteligente con solo pensar en las acciones que desea realizar. Puede encender y apagar luces, ver quién está en la puerta, realizar videollamadas, controlar su cámara de seguridad Ring, y mucho más, todo sin mover un dedo ni pronunciar una palabra.
Este logro es un gran paso en la integración de la BCI con la tecnología de consumo. Según Oxley, la misión de Synchron es «restaurar la libertad de expresión» para las personas con parálisis, permitiéndoles interactuar con su entorno de una manera que antes no era posible.
El camino hacia la comercialización
Aunque Synchron ha logrado grandes avances, aún queda mucho trabajo por hacer antes de que esta tecnología llegue al público general. La FDA tiene protocolos estrictos que requieren ensayos clínicos prolongados antes de aprobar productos para su comercialización. Mientras tanto, Synchron se prepara para un estudio clínico de mayor escala, con más pacientes.
Este estudio no solo permitirá refinar la tecnología, sino también mejorar la experiencia de los usuarios. Mark, por ejemplo, ha sido clave en este proceso al proporcionar retroalimentación valiosa sobre su uso del Vision Pro. Él espera que su participación ayude a mejorar la vida de otras personas en situaciones similares.
El potencial de las interfaces cerebro-computadora
El avance de Synchron con el Apple Vision Pro y Alexa es solo el comienzo de lo que podría ser una revolución en la forma en que las personas interactúan con la tecnología. Oxley lo describe como «el comienzo de una nueva opción terapéutica para restaurar la capacidad de interactuar con la tecnología digital que damos por sentada».
Las interfaces cerebro-computadora no solo tienen el potencial de mejorar la calidad de vida de las personas con parálisis, sino que también podrían abrir nuevas posibilidades en campos como la realidad aumentada, el control remoto de dispositivos y la interacción con inteligencia artificial.
Synchron está liderando el camino en la integración de la neurotecnología con la tecnología de consumo. Al conectar su BCI con el Apple Vision Pro y el asistente virtual Alexa, la empresa está demostrando que es posible devolver una parte de la independencia a personas que han perdido el control de sus cuerpos. Aunque aún queda mucho por hacer antes de que esta tecnología esté disponible para el público en general, los avances logrados hasta ahora son una señal prometedora del futuro de las interfaces cerebro-computadora.