El control del tráfico aéreo en Estados Unidos, uno de los más complejos y transitados del mundo, ha estado funcionando con tecnología que parece sacada de un museo. Disquetes de 3.5 pulgadas y computadoras con Windows 95 han sido, hasta hace poco, el corazón de muchos sistemas críticos en los aeropuertos. En 2025, la Administración Federal de Aviación (FAA) ha decidido dar un paso al frente para modernizar esta infraestructura obsoleta, un cambio que promete transformar la seguridad y eficiencia del transporte aéreo. Este artículo explora cómo la FAA planea dejar atrás los años 90, los desafíos que enfrenta y por qué este proyecto es considerado uno de los más importantes en décadas.
Un Viaje al Pasado: Disquetes y Windows 95 en los Cielos
Imagina un aeropuerto moderno, con aviones de última generación surcando los cielos, pero controlados por computadoras que ejecutan Windows 95. Sí, el sistema operativo que muchos recuerdan por su icónica pantalla de inicio y sus disquetes de 1.44 MB. Durante más de tres décadas, la FAA ha dependido de esta tecnología para gestionar el tráfico aéreo en Estados Unidos. Controladores aéreos han usado disquetes para transferir datos y tiras de papel para seguir el rastro de los vuelos, un método que, aunque funcional, es cada vez más insostenible.
La razón detrás de esta longevidad tecnológica es simple: si funciona, ¿para qué cambiarlo? Los sistemas basados en Windows 95 y disquetes han demostrado ser confiables, pero no están exentos de riesgos. La falta de soporte técnico para software tan antiguo, junto con la dificultad para encontrar piezas de repuesto, ha encendido las alarmas. Incidentes recientes, como los fallos en el aeropuerto de Newark, han puesto en evidencia las vulnerabilidades de esta infraestructura.
La FAA se Pone en Marcha: Un Proyecto de Miles de Millones
La FAA, consciente de que el tiempo de los disquetes ha terminado, ha anunciado un ambicioso plan de modernización. Chris Rocheleau, administrador interino de la FAA, fue claro al declarar ante el Comité de Asignaciones del Congreso: “La idea es sustituir el sistema. Se acabaron los disquetes y las tiras de papel”. Este proyecto, respaldado por el secretario de Transporte, Sean Duffy, es descrito como “el proyecto de infraestructura más importante en décadas”.
El plan incluye reemplazar 51 de los 138 sistemas considerados insostenibles, según un informe de la Oficina de Responsabilidad del Gobierno (GAO) publicado en marzo de 2025. Estos sistemas, algunos con más de 30 años de antigüedad, serán sustituidos por tecnologías modernas como fibra óptica, conexiones inalámbricas y sistemas basados en satélites. La FAA ha emitido una Solicitud de Información (RFI) para invitar a empresas tecnológicas a presentar propuestas, y ya se han programado “Días de la Industria” para evaluar soluciones.
¿Por qué la Modernización es Urgente?
El uso de tecnología obsoleta no es solo una curiosidad tecnológica; representa un riesgo real. Los disquetes son frágiles y propensos a la corrupción de datos. Encontrar repuestos para hardware de los años 90 es una tarea casi arqueológica, con piezas que a menudo solo se consiguen en sitios como eBay. Además, los sistemas con Windows 95 carecen de actualizaciones de seguridad, lo que los hace vulnerables a ciberataques, aunque su aislamiento de internet ha sido una ventaja hasta ahora.
Incidentes como el corte del sistema de Avisos a los Aviadores en enero de 2023, que paralizó todos los vuelos en Estados Unidos durante más de dos horas, han demostrado que la infraestructura actual está al límite. En Newark, fallos en radares y comunicaciones debido a cables de cobre deteriorados causaron cientos de retrasos y cancelaciones. Estos eventos han reforzado la urgencia de modernizar.
Un Proyecto Colosal: Desafíos Técnicos y Financieros
Modernizar el control aéreo no es tan simple como cambiar un ordenador viejo por uno nuevo. Los sistemas de la FAA operan 24/7, y cualquier interrupción podría tener consecuencias catastróficas. Esto requiere técnicas de despliegue “hot swap”, que permitan reemplazar componentes sin apagar el sistema. Además, las nuevas tecnologías deben cumplir con estrictos estándares de seguridad funcional, como DO-178C y DO-254, para garantizar que no fallen en situaciones críticas.
El costo estimado de este proyecto es astronómico, con cifras que oscilan entre los 30 y 40 mil millones de dólares. Aunque el gobierno ha mostrado un apoyo bipartidista, la aprobación del presupuesto será un desafío. La consolidación de centros de control, que pasarán de 21 a solo 6, también enfrenta resistencia política, ya que muchos congresistas no quieren perder instalaciones en sus distritos.
Lecciones de Incidentes Pasados
Los fallos recientes han sido una llamada de atención. En 2023, un problema con la base de datos del sistema de Avisos a los Aviadores dejó en tierra a todos los vuelos en Estados Unidos. Más recientemente, en abril de 2025, las fallas en Newark resaltaron la fragilidad de los cables de cobre y el hardware antiguo. Estos incidentes no solo causaron molestias a los pasajeros, sino que también pusieron en riesgo la seguridad aérea.
A pesar de estos problemas, la tecnología antigua ha tenido un lado positivo: su simplicidad. Los sistemas basados en Windows 95 son menos propensos a fallos causados por malware moderno, ya que no están diseñados para conectarse a internet. Sin embargo, esta ventaja no compensa los riesgos de obsolescencia.
La Coalición Modern Skies: Una Voz por el Cambio
La presión para modernizar no solo viene de la FAA. La coalición Modern Skies, formada por sindicatos de controladores aéreos, aerolíneas y fabricantes, ha jugado un papel clave. Esta alianza lanzó una campaña publicitaria que destaca el uso de disquetes en los aeropuertos, generando conciencia sobre la necesidad de cambio. Su mensaje es claro: los cielos de Estados Unidos merecen tecnología del siglo XXI.
Modern Skies ha trabajado para movilizar a la opinión pública y al Congreso, enfatizando que la modernización no es solo una cuestión técnica, sino de seguridad nacional. Su campaña ha resonado, logrando un apoyo amplio y apartidista para el proyecto.
¿Qué Implica la Modernización?
El plan de la FAA, parte del programa Next Generation Air Transportation System (NextGen), incluye varias fases. Entre los objetivos están:
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Reemplazo de disquetes: Transferencias de datos manuales serán sustituidas por redes seguras con protocolos como SFTP e IPSec, reduciendo el tiempo de carga de datos de minutos a segundos.
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Sistemas operativos modernos: Windows 95 dará paso a sistemas como Linux o versiones recientes de Windows, diseñados para entornos críticos.
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Infraestructura avanzada: Se implementarán fibra óptica, conexiones inalámbricas y control por satélite, reemplazando cables de cobre y radares analógicos.
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Consolidación de centros: La reducción de 21 a 6 centros de control implicará virtualización y tecnología de punta para gestionar el tráfico a gran altitud.
Estos cambios buscan no solo mejorar la fiabilidad, sino también la eficiencia. Un sistema más rápido y preciso podría reducir retrasos y optimizar rutas aéreas, ahorrando combustible y tiempo.
Un Proyecto con Obstáculos Políticos
Aunque el proyecto cuenta con apoyo bipartidista, no está exento de complicaciones políticas. La consolidación de centros de control es un punto de fricción. Michael Huerta, exadministrador de la FAA, señaló que reducir las instalaciones de 21 a 6 enfrentará resistencia de congresistas que ven estas instalaciones como activos locales. La política podría retrasar o encarecer el proceso.
Además, el plazo de cuatro años propuesto por el secretario Duffy es considerado “extremadamente optimista” por expertos como Sheldon Jacobson, profesor de la Universidad de Illinois. La complejidad de modernizar sistemas que no pueden apagarse, junto con los costos masivos, hace que muchos duden de que se cumpla este cronograma.
No Solo la FAA: Otros Sistemas Obsoletos
La FAA no es la única organización atrapada en los años 90. En San Francisco, el sistema de control de trenes aún usa DOS y disquetes de 5.25 pulgadas, con actualizaciones previstas recién para 2030. En Japón, los sistemas de registro gubernamentales también dependen de disquetes. Incluso en sectores como la salud o la banca, Windows 95 y 98 siguen presentes en equipos especializados, como máquinas médicas o cajeros automáticos.
Estos casos muestran un problema global: la resistencia a actualizar sistemas críticos debido a su fiabilidad comprobada y los altos costos de modernización. Sin embargo, la FAA está decidida a liderar el camino hacia un futuro más seguro.
Beneficios de un Sistema Moderno
Un sistema de control aéreo actualizado traerá múltiples beneficios. Además de mejorar la seguridad, permitirá:
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Mayor eficiencia: Rutas más optimizadas y menos retrasos.
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Ciberseguridad robusta: Protección contra amenazas modernas.
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Sostenibilidad: Menor consumo energético y mantenimiento más sencillo.
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Capacidad para el futuro: Integración de drones y vuelos espaciales comerciales, que están creciendo rápidamente.
Estos avances pondrán a Estados Unidos a la par de países como los de Europa y Asia, que ya han implementado tecnologías más avanzadas en sus sistemas de control aéreo.
Voces de la Industria: ¿Qué Dicen los Expertos?
Expertos como David Grizzle, exdirector de operaciones de la FAA, consideran que el plazo de cuatro años es poco realista, pero aplauden el inicio del proyecto. “Si pueden empezar en cada uno de los elementos, sería un gran avance”, afirmó Grizzle. Otros, como Jacobson, destacan que, aunque los sistemas actuales funcionan bien, la modernización es crucial para evitar fallos catastróficos en el futuro.
La comunidad tecnológica también está atenta. En foros como Windows Forum, se debate si sistemas como OpenBSD podrían ser una alternativa viable a Windows para entornos críticos, dado su enfoque en seguridad y simplicidad. Sin embargo, los requisitos de tiempo real del control aéreo podrían limitar las opciones.
El Futuro de los Cielos Estadounidenses
La modernización de los sistemas de control aéreo de la FAA es más que un cambio tecnológico; es un paso hacia el futuro de la aviación. Con un presupuesto de decenas de miles de millones y un plazo ambicioso, el camino no será fácil. Sin embargo, la urgencia de dejar atrás los disquetes y Windows 95 es innegable. Los cielos de Estados Unidos, que manejan millones de vuelos al año, merecen una infraestructura a la altura de los desafíos del siglo XXI.
El éxito de este proyecto dependerá de la colaboración entre la FAA, el gobierno, la industria tecnológica y el público. Si se logra, no solo mejorará la seguridad aérea, sino que también servirá como modelo para modernizar otras infraestructuras críticas en el mundo. Por ahora, los disquetes y Windows 95 siguen en los aeropuertos, pero su despedida está más cerca que nunca.
