En un contexto de creciente preocupación por la seguridad de los adolescentes en redes sociales, TikTok vuelve a estar en el ojo del huracán tras la revelación de documentos internos que sugieren que sus herramientas para limitar el tiempo de pantalla no son eficaces. Los documentos, obtenidos por Kentucky Public Radio (KPR) y analizados en conjunto con NPR, exponen preocupaciones sobre la seguridad de los jóvenes en la plataforma y muestran que estas herramientas no están realmente diseñadas para reducir el tiempo de uso en adolescentes. Esta situación ha llevado a una serie de demandas en contra de la empresa, encabezadas por un grupo bipartidista de 14 fiscales generales en Estados Unidos.
Herramientas de gestión de tiempo: ¿Ineficaces y solo un recurso mediático?
Tras numerosas críticas públicas, TikTok introdujo hace un tiempo un sistema de límites de tiempo de pantalla para usuarios menores de 18 años. Según los documentos, la herramienta permite establecer un límite de 60 minutos, después de los cuales los usuarios deben ingresar un código para continuar navegando. Sin embargo, la efectividad de esta medida ha sido cuestionada. Las comunicaciones internas revelan que TikTok no estaba interesado en reducir realmente el tiempo de pantalla de sus usuarios adolescentes, sino en mejorar su imagen ante la opinión pública y los medios de comunicación.
Un directivo de TikTok citado en los documentos expresó que el objetivo no era reducir el tiempo en pantalla, sino contribuir a la retención de usuarios diarios (DAU, por sus siglas en inglés) y aumentar la fidelización de los adolescentes a la plataforma. Según se explica en el informe, la herramienta de control de tiempo solo logró una disminución promedio de 1,5 minutos en el uso diario. Pese a estos resultados poco satisfactorios, la compañía decidió no realizar ajustes adicionales.
Demandas de los fiscales generales: un llamado a la acción
La falta de eficacia de las herramientas de tiempo y otros aspectos de la plataforma han motivado la reciente demanda colectiva encabezada por los fiscales generales. Entre las quejas presentadas, se señala la facilidad con la que los adolescentes pueden pasar horas viendo videos, el potencial de contenido perjudicial en los «desafíos» de TikTok y el efecto negativo de las notificaciones nocturnas que pueden interferir en el sueño de los jóvenes.
Según el grupo de fiscales, el diseño de TikTok se basa en estrategias que buscan retener a los jóvenes en la plataforma y, al hacerlo, pueden afectar su salud mental. El uso prolongado y sin control de la red social ha sido vinculado a problemas como la ansiedad, la depresión y el estrés en adolescentes, lo cual ha provocado que las autoridades busquen tomar medidas en contra de lo que ven como una adicción creada intencionadamente.
Revelaciones de documentos sellados y críticas a la transparencia de TikTok
El informe de NPR y KPR surgió luego de que la Oficina del Fiscal General de Kentucky presentara documentos sin censura en una demanda contra TikTok. Estos documentos no redactados contenían información sensible que fue accesible brevemente antes de que un juez de Kentucky sellara la queja por completo. En esta información, se revelaron varios detalles sobre cómo los ejecutivos de TikTok reconocían internamente los problemas de seguridad para los jóvenes y, a pesar de ello, continuaban implementando estrategias para mantener altos niveles de uso en adolescentes.
Alex Haurek, portavoz de TikTok, se mostró en desacuerdo con las acusaciones y calificó de irresponsable la decisión de NPR de publicar información protegida por una orden judicial. Haurek defendió la labor de la compañía en la implementación de medidas de seguridad para jóvenes, tales como la eliminación de usuarios menores de edad sospechosos y la introducción de opciones como el límite de tiempo predeterminado y el emparejamiento familiar.
La respuesta de TikTok: entre la defensa de sus medidas y la controversia
TikTok ha respondido a estas revelaciones alegando que los documentos han sido interpretados fuera de contexto y que las citas extraídas de las comunicaciones internas no reflejan su compromiso con la seguridad de los usuarios jóvenes. “Este reclamo selecciona citas de forma engañosa y saca de contexto documentos desactualizados”, indicó la empresa. Asimismo, TikTok ha asegurado que sus medidas de seguridad son robustas y proactivas, incluyendo la limitación de la privacidad de los menores de 16 años y otras iniciativas para fortalecer la seguridad de sus jóvenes usuarios.
Pese a estas afirmaciones, los documentos internos parecen contradecir los esfuerzos públicos de TikTok para mejorar la seguridad de su plataforma. Los críticos afirman que estas iniciativas parecen ser más un intento de calmar a los reguladores y medios de comunicación que un esfuerzo genuino para reducir el uso y el impacto en la salud mental de los adolescentes.
Implicaciones para el futuro de TikTok y la privacidad de los datos
Aparte de las demandas presentadas, TikTok enfrenta un plazo inminente, pues deberá desvincularse de su empresa matriz, ByteDance, para enero, o de lo contrario podría ser prohibida en todo el país. Este nuevo marco legal refleja una mayor presión regulatoria en torno a la aplicación, especialmente en cuanto a sus prácticas de privacidad y la capacidad de TikTok para filtrar contenido que pueda ser perjudicial para menores.
La aplicación ha sido objeto de investigaciones y regulaciones estrictas en otros países por temas de privacidad, pero la combinación de preocupaciones sobre la salud mental de los adolescentes y la influencia de ByteDance ha generado una preocupación especial en Estados Unidos. Las demandas buscan forzar a la compañía a implementar cambios que protejan a los menores de edad de la adicción y el contenido perjudicial.
¿Puede TikTok realmente proteger a los adolescentes?
Las revelaciones de los documentos internos de TikTok dejan en evidencia una contradicción entre las políticas públicas de la empresa y sus verdaderos objetivos, que parecen priorizar la retención de usuarios sobre la seguridad de los jóvenes. Aunque TikTok ha introducido medidas para el bienestar de sus usuarios menores de edad, los resultados muestran que estas herramientas apenas tienen impacto real en el tiempo de pantalla. Los documentos también sugieren que la compañía es consciente de los efectos negativos de su diseño en la salud mental de los adolescentes, pero que estos riesgos se subordinan a sus intereses comerciales.
A medida que las demandas avanzan y la presión pública crece, TikTok podría verse obligado a revisar y mejorar sus políticas para ofrecer una plataforma más segura para los adolescentes. En un momento en el que la discusión sobre la salud mental y la seguridad digital es más relevante que nunca, las redes sociales como TikTok están bajo escrutinio para demostrar un compromiso genuino con la protección de sus usuarios jóvenes.