Introducción
La gastritis es una condición digestiva cada vez más común, caracterizada por la inflamación del revestimiento del estómago. Sus causas pueden ser diversas, desde infecciones por Helicobacter pylori, el uso excesivo de medicamentos antiinflamatorios, hasta factores como el estrés y una alimentación inadecuada.
Para quienes padecen esta afección, la dieta juega un papel crucial en el manejo de los síntomas. Algunos alimentos pueden irritar aún más la mucosa gástrica y aumentar la producción de ácido, empeorando el malestar. Por ello, es esencial conocer cuáles son los alimentos y bebidas que debes evitar si tienes gastritis.
¿Qué es la gastritis?
La gastritis es la inflamación del revestimiento interno del estómago, conocida como mucosa gástrica. Esta inflamación puede ser aguda (de aparición repentina y duración corta) o crónica (persistente en el tiempo). Los síntomas más comunes incluyen dolor o ardor en la parte superior del abdomen, náuseas, sensación de llenura, indigestión y, en algunos casos, vómitos.
Cuando no se trata adecuadamente, la gastritis puede derivar en úlceras gástricas, hemorragias internas o, en casos más severos, cáncer gástrico. Por eso, controlar los factores desencadenantes, especialmente la dieta, es fundamental.
¿Por qué la alimentación influye en los síntomas?
La mucosa gástrica es altamente sensible a lo que consumimos. Algunos alimentos estimulan la producción excesiva de ácido, mientras que otros irritan directamente las paredes del estómago. Además, ciertos ingredientes pueden retrasar la digestión, generando una mayor permanencia de alimentos en el estómago y aumentando el riesgo de inflamación.

Evitar ciertos alimentos y bebidas es uno de los primeros pasos recomendados por los gastroenterólogos para aliviar los síntomas de la gastritis y permitir que el estómago se recupere.
1. Café
Aunque es una bebida popular en todo el mundo, el café puede ser perjudicial para quienes sufren de gastritis. Su contenido de cafeína estimula directamente la producción de ácido gástrico, lo cual puede irritar aún más el estómago inflamado. Incluso el café descafeinado puede causar molestias debido a su acidez natural.
- Consejo: Si no puedes prescindir del café, intenta limitar su consumo, diluirlo con leche vegetal no ácida (como la de almendras) y optar por versiones de baja acidez.
2. Alcohol
El alcohol es uno de los irritantes gástricos más agresivos. Actúa directamente sobre la mucosa gástrica, debilitándola y aumentando la inflamación. Además, estimula la secreción de ácido y puede retrasar la curación de lesiones gástricas existentes.
- Consejo: Evita completamente el alcohol durante un brote de gastritis. A largo plazo, modera su consumo o elimínalo de tu dieta si la gastritis es crónica.
3. Alimentos fritos
Los alimentos fritos son ricos en grasas saturadas, lo que dificulta la digestión. Esta digestión lenta provoca una mayor permanencia de los alimentos en el estómago, lo que incrementa la producción de ácido y agrava la inflamación.
- Consejo: Sustituye las frituras por métodos de cocción más suaves como el vapor, el horno o el salteado con poco aceite.

4. Cítricos y jugos ácidos
Frutas como naranja, limón, pomelo y lima, así como sus jugos, contienen altos niveles de acidez que pueden irritar el estómago. Aunque son saludables en otras circunstancias, para quienes padecen gastritis resultan contraproducentes.
- Consejo: Opta por frutas menos ácidas como la manzana, el plátano o la pera, especialmente cocidas o en compotas suaves.
5. Comidas muy condimentadas o picantes
El chile, la pimienta negra, el curry y otras especias fuertes pueden desencadenar una mayor producción de ácido y causar una irritación directa de la mucosa gástrica. Las comidas picantes están directamente relacionadas con un aumento de los síntomas de gastritis.
- Consejo: Reduce el uso de especias fuertes y prefiere hierbas suaves como el orégano, la albahaca o el perejil.
6. Tomate y productos derivados
El tomate, aunque nutritivo, es naturalmente ácido. Sus derivados como la salsa de tomate, el kétchup o los jugos de tomate también pueden provocar ardor y molestias estomacales.
- Consejo: Evita los productos de tomate cocidos y procesados. Si consumes tomate, hazlo en pequeñas cantidades y preferiblemente cocido con poca grasa.
7. Refrescos y bebidas carbonatadas
Los refrescos y gaseosas combinan tres enemigos del estómago: el gas (que puede distender el estómago), el alto contenido de azúcar y la acidez. Esta combinación puede provocar reflujo, inflamación y dolor abdominal.
- Consejo: Sustituye estas bebidas por infusiones suaves (como manzanilla o jengibre) o agua natural.
8. Chocolate
Aunque delicioso, el chocolate contiene cafeína, teobromina y grasas, tres elementos que estimulan la producción de ácido y pueden irritar el estómago. Además, muchas versiones comerciales incluyen leche entera y azúcares añadidos.
- Consejo: Si no puedes dejar el chocolate, opta por versiones con bajo contenido de grasa y sin leche, en cantidades muy moderadas.
9. Lácteos enteros
Los lácteos enteros como la leche completa, quesos curados y cremas contienen grasas que ralentizan la digestión. Además, algunas personas con gastritis también presentan intolerancia a la lactosa, lo que agrava los síntomas.
- Consejo: Elige versiones bajas en grasa o sustitutos vegetales como bebidas de arroz, avena o coco sin azúcar ni aditivos.

10. Embutidos y carnes procesadas
Los embutidos, salchichas, jamones y carnes curadas están cargados de nitratos, conservantes, grasas saturadas y condimentos fuertes, lo que los convierte en un cóctel agresivo para el estómago inflamado. Son difíciles de digerir y promueven la acidez.
Consejo: Reemplaza estos alimentos por proteínas magras como el pollo, el pavo o el pescado al horno o al vapor.
Recomendaciones generales
- Comer en porciones pequeñas y frecuentes para evitar la sobrecarga gástrica.
- Masticar bien los alimentos.
- Evitar acostarse inmediatamente después de comer.
- Mantenerse bien hidratado con agua o infusiones suaves.
- Reducir el estrés, ya que es un desencadenante frecuente de la gastritis.
Alternativas saludables
- Aquí algunas opciones amigables para quienes padecen gastritis:
- Verduras cocidas como calabacín, zanahoria, papa y calabaza.
- Carnes magras cocidas sin grasa añadida.
- Frutas suaves como manzana cocida, plátano maduro o pera.
- Infusiones de manzanilla, malva o jengibre.
- Cereales integrales suaves como arroz, avena y pan blanco bajo en fibra.
Conclusión
La gastritis es una afección que puede gestionarse eficazmente con una alimentación adecuada. Evitar ciertos alimentos y bebidas que irritan la mucosa gástrica es una parte esencial del tratamiento. El primer paso es reconocer qué elementos de tu dieta podrían estar causando o empeorando los síntomas.