Introducción
Alejandro Sanz, el intérprete de “Corazón partío” y una de las voces más emblemáticas de la música en español, no solo está en boca de todos por sus canciones, sino ahora también por una historia que ha encendido las redes sociales y dividido opiniones en todo el mundo. ¿La razón? Una joven fan catalana, Ivet Playa, asegura que tuvo una relación íntima con el cantante cuando ella tenía apenas 18 años… y ahora lo acusa de haberla maltratado emocionalmente.
Sí, leíste bien. La noticia explotó como una bomba mediática el 15 de junio, cuando Ivet publicó un video en TikTok que no tardó en hacerse viral. En él, la joven de 26 años relató una historia que comenzó en 2015, cuando ella era una fan más y Sanz ya era una leyenda viva de la música. Pero según ella, ese fanatismo se convirtió en algo mucho más personal… e íntimo.
De fan a algo más: el inicio de una historia controvertida
Todo empezó —según el relato de Ivet— cuando Alejandro Sanz comenzó a seguirla en redes sociales, le enviaba mensajes privados, comentaba sus fotos, e incluso compartía publicaciones relacionadas con ella. No pasó mucho tiempo hasta que concertaron un encuentro en persona. “Quedamos para conocernos en privado cuando yo tenía 18 años, él tenía 49 en ese momento”, cuenta Ivet en el video.
Años más tarde, ya con 22 años, ella tomó la decisión de dejar su ciudad natal, Barcelona, para mudarse a Madrid. ¿La razón? Supuestamente, una oferta laboral de parte del propio cantante. Pero lo que parecía un sueño hecho realidad para una joven fan, pronto se convirtió —en sus palabras— en una pesadilla emocional. Según su testimonio, la relación pasó de ser profesional a personal, con encuentros sexuales incluidos, mientras Sanz aún estaba casado con Raquel Perera.
Pruebas, humillación y ruptura
Ivet no se guardó nada. Asegura tener “pruebas demoledoras” de su historia con Alejandro Sanz, aunque hasta el momento no se ha mostrado ningún material gráfico concreto. Lo que sí ha dejado claro es cómo se sintió a lo largo de estos años: engañada, manipulada, utilizada.
“Me siento sucia, humillada, fue una relación inhumana”, dijo en otro fragmento del video. Además, señala que llegó un punto en que la situación era emocionalmente insostenible para ella, y que la forma en la que terminó todo la dejó con heridas profundas.
Como era de esperarse, sus declaraciones dividieron por completo a los fans del artista: algunos la acusan de buscar fama fácil o aprovecharse de su pasado, mientras que otros la apoyan y creen firmemente en su historia. Lo cierto es que el tema ya ha alcanzado un nivel mediático que no parece tener freno.
La respuesta de Alejandro Sanz: “Yo tenía un recuerdo muy bonito de nosotros dos”
Ante el revuelo, Alejandro Sanz no tardó en romper el silencio. Lo hizo a través de un comunicado público donde se mostró sereno, pero claramente dolido. “Ivet, yo tenía un recuerdo muy bonito de nosotros dos, personas adultas compartiendo su cariño, siendo libres. Qué pena que este sentimiento se haya roto ahora”, expresó el cantante.
Sanz también quiso aclarar el contexto actual. Según él, en mayo de este año, Ivet le propuso participar en negocios familiares, pero decidió no involucrarse tras consultar con sus asesores. Esto, según muchos, podría dar a entender que la denuncia pública fue una especie de represalia tras esa negativa.
No obstante, el cantante evitó hablar de forma directa sobre si hubo o no una relación sentimental o sexual. Tampoco entró en detalles sobre si su vínculo con ella coincidió con su matrimonio. Lo que sí dejó ver fue su molestia por la forma en que esta historia salió a la luz.
La opinión pública: ¿víctima o estrategia?
Las redes están en llamas. En Twitter, TikTok e Instagram, el nombre de Alejandro Sanz volvió a posicionarse entre las principales tendencias, pero esta vez no por una nueva canción ni una gira mundial. Y los comentarios son tan variados como intensos.
Por un lado, están quienes creen que Ivet es una víctima más del abuso de poder que suelen ejercer las celebridades. Según esta visión, ella era una joven vulnerable, impresionada por la fama y el carisma de un hombre casi 30 años mayor que ella. Para estos usuarios, el hecho de que Ivet diga que se sintió “sucia y humillada” habla de una clara asimetría de poder en la relación.
Por otro lado, hay quienes consideran que esta historia está incompleta, y que Ivet podría estar exagerando o manipulando los hechos por resentimiento o incluso por interés económico. No faltan quienes señalan que la intención de involucrarlo en negocios fallidos podría ser el verdadero detonante detrás de las acusaciones.
¿Y ahora qué? ¿Cómo afecta esto a Alejandro Sanz?
La carrera de Alejandro Sanz siempre se ha caracterizado por mantenerse más ligada a la música que a los escándalos, por eso este episodio ha causado tanto revuelo. A sus 55 años, Sanz sigue siendo uno de los artistas más influyentes del pop en español, con una legión de fans leales que han crecido con su música.
Sin embargo, en tiempos donde los movimientos sociales han puesto foco sobre las dinámicas de poder y el consentimiento, incluso figuras tan queridas como él no están exentas de ser cuestionadas. Aunque la justicia no se ha pronunciado y esto sigue siendo, por ahora, un tema del ámbito mediático, la sombra de la duda ya está sembrada.
Habrá que ver si Sanz decide hablar más a fondo o si Ivet presenta las supuestas “pruebas gráficas demoledoras” que mencionó. De momento, el escándalo sigue creciendo como una bola de nieve.
Conclusión
Esta historia, más allá del morbo mediático, plantea muchas preguntas sobre los límites de las relaciones entre celebridades y sus fans, las diferencias de poder, y el impacto emocional que pueden tener estos vínculos aparentemente “consentidos”. También nos recuerda que, en la era digital, todo puede volverse viral en cuestión de segundos, para bien o para mal.
Mientras tanto, Alejandro Sanz intenta mantener la calma ante una tormenta que apenas comienza. Y Ivet Playa, con su testimonio, ha abierto la puerta a una conversación incómoda, pero necesaria. ¿Tú qué opinas?
