¿Por qué nacen personas hermafroditas? Top 10 explicaciones científicas sobre la intersexualidad

Descubre las 10 causas científicas detrás del nacimiento de personas intersexuales y comprende cómo la biología del desarrollo sexual revela una realidad diversa, compleja y profundamente humana.

¿Por qué nacen personas hermafroditas? Esta pregunta, que ha generado curiosidad y controversia durante siglos, encuentra hoy respuestas claras en la ciencia moderna bajo el término clínico correcto: intersexualidad. La intersexualidad es una variación natural en el desarrollo biológico del sexo, que afecta a millones de personas en todo el mundo. Sin embargo, aún persisten mitos, estigmas y desconocimiento sobre sus causas reales.

Desmitificamos el concepto de «hermafroditismo» humano y presentamos las 10 explicaciones científicas más relevantes sobre la intersexualidad. Desde anomalías cromosómicas hasta alteraciones enzimáticas y causas genéticas complejas, te guiaremos por el fascinante mundo de la biología del desarrollo sexual.

Prepárate para descubrir un tema profundo, actual y necesario, abordado con rigor científico, sensibilidad y claridad.

1. Intersexualidad y hermafroditismo: diferencias clave y contexto científico

El término hermafroditismo fue históricamente utilizado para describir a personas con características sexuales masculinas y femeninas, pero actualmente se considera impreciso y obsoleto. En su lugar, se emplea el término intersexualidad, que abarca una serie de condiciones en las que el desarrollo sexual no sigue el patrón típico masculino (XY) o femenino (XX).

La intersexualidad no implica necesariamente tener órganos sexuales masculinos y femeninos completamente desarrollados, sino que puede manifestarse de distintas maneras: ambigüedad genital, discrepancias entre cromosomas sexuales y fenotipo, o incluso presencia de características sexuales internas de ambos sexos.

Según la ONU, entre el 0.05% y el 1.7% de la población mundial nace con rasgos intersexuales, una cifra comparable al número de personas pelirrojas.

2. Síndrome de insensibilidad a los andrógenos (SIA): genética XY con apariencia femenina

Una de las causas más documentadas de intersexualidad es el Síndrome de Insensibilidad a los Andrógenos (SIA). Las personas con SIA tienen un cariotipo XY (masculino), pero su cuerpo no responde a las hormonas sexuales masculinas, como la testosterona.

Como resultado, desarrollan características físicas femeninas, aunque internamente carecen de útero y ovarios. A menudo, este síndrome se detecta en la adolescencia, cuando no se presenta la menstruación. El SIA demuestra cómo una alteración en la respuesta hormonal puede modificar completamente el desarrollo sexual, pese a una genética típicamente masculina.

3. Hiperplasia suprarrenal congénita (HSC): exceso de andrógenos en fetos XX

En personas con genética femenina (XX), la Hiperplasia Suprarrenal Congénita puede causar el desarrollo de genitales ambiguos o masculinizados. Esto ocurre por una deficiencia enzimática que produce un exceso de andrógenos durante el desarrollo fetal.

La HSC es una de las causas más comunes de intersexualidad en recién nacidas. Aunque la mayoría de estas personas tienen ovarios y útero funcionales, su aspecto genital puede ser confundido con el masculino, lo que puede llevar a diagnósticos erróneos al nacer.

4. Disgenesia gonadal: cuando las gónadas no se desarrollan adecuadamente

La disgenesia gonadal se refiere al desarrollo anormal de las gónadas (ovarios o testículos). En condiciones como el síndrome de Swyer, una persona puede tener cromosomas XY pero sus gónadas no se desarrollan en testículos funcionales, lo que lleva a una apariencia externa femenina, aunque internamente hay ausencia de útero y ovarios.

En muchos casos, la disgenesia gonadal se asocia a un alto riesgo de tumores en los tejidos gonadales, por lo que es importante un diagnóstico temprano para garantizar una atención médica adecuada.

5. Síndrome de Klinefelter (XXY): un cromosoma extra que modifica el desarrollo sexual

El síndrome de Klinefelter afecta a personas con un cromosoma sexual adicional (XXY). Aunque suelen tener genitales masculinos, muchos presentan testículos pequeños, infertilidad, ginecomastia (desarrollo mamario) y otras características físicas intersexuales.

Se estima que uno de cada 600 varones nace con este síndrome, aunque muchos no son diagnosticados hasta la adultez. Su existencia demuestra que el espectro biológico del sexo no siempre es binario ni evidente al nacer.

6. Síndrome de Turner (XO): cuando falta un cromosoma sexual

El síndrome de Turner afecta a personas con un solo cromosoma sexual (XO). Aunque generalmente tienen genitales femeninos, presentan ovarios no funcionales, estatura baja, infertilidad y posibles alteraciones cardíacas o renales.

Este síndrome pone en evidencia que la simple presencia de cromosomas XX o XY no garantiza un desarrollo sexual típico. También se considera una forma de intersexualidad porque interfiere con la función gonadal y el desarrollo hormonal normal.

7. Mosaicismo genético: dos códigos genéticos diferentes en un solo cuerpo

En algunos casos, una persona puede tener dos líneas celulares con diferentes configuraciones cromosómicas (por ejemplo, 46,XX/46,XY). Esto se conoce como mosaicismo o quimerismo genético.

Dependiendo de la distribución celular, puede dar lugar a ambigüedad genital o una mezcla de tejidos gonadales masculinos y femeninos. Es una de las causas más raras de intersexualidad, pero también una de las más reveladoras sobre la complejidad genética del ser humano.

8. Trastornos de la biosíntesis hormonal: desequilibrio enzimático en las glándulas sexuales

El desarrollo sexual está mediado por rutas hormonales complejas que pueden fallar por deficiencia de enzimas como la 5-alfa reductasa. Cuando esta enzima falla en personas XY, los andrógenos no se convierten en dihidrotestosterona (DHT), lo que impide el desarrollo completo de genitales masculinos.

En muchos casos, estas personas son criadas como niñas hasta la pubertad, cuando comienzan a desarrollar características masculinas. Esta condición plantea importantes dilemas médicos y sociales sobre la asignación de género al nacer.

9. Exposición hormonal durante el embarazo: efectos ambientales en la diferenciación sexual

La exposición intrauterina a ciertas sustancias, como medicamentos hormonales o disruptores endocrinos, puede alterar el desarrollo sexual fetal. Este fenómeno demuestra que el entorno también influye en la intersexualidad.

Ejemplos históricos incluyen el uso del fármaco dietilestilbestrol (DES), que fue administrado a mujeres embarazadas entre los años 40 y 70, provocando malformaciones genitales en sus hijos. Aunque hoy está prohibido, otros químicos ambientales siguen siendo motivo de estudio.

10. Intersexualidad sin causa definida: la biología aún guarda misterios

En algunos casos, la intersexualidad no puede explicarse por ninguna alteración cromosómica, hormonal ni anatómica evidente. Estos casos plantean desafíos diagnósticos y sugieren que todavía hay mecanismos genéticos y epigenéticos no comprendidos completamente.

La medicina está en constante evolución, y es probable que en el futuro se descubran nuevas causas y variantes de intersexualidad que hoy escapan a la tecnología genética actual.

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